Por Roberto Romeo Di Vita
Periodista y escritor
“VOZ te ataré a los puños como una llama y CONTRAVOZ entierra la pluma antes de atarte a los puños”. Con estos versos de Alfonsina Storni se dio toda la motivación de unos de los encuentros de escritores y artistas de los más solidarios y emotivos que participé.
“Voz y Contravoz”, se llevó a cabo, los días 29, 30 de abril y 1ro de mayo en la Avenida Camet 2750, edificio hotel y salón, frente al mar, frente a la elevación de la playa, horizonte hacia el sur de la ciudad de Mar del Plata, cielo de todas las emociones allí guardadas.
Declarado de Interés Cultural por la Secretaría de Cultura del Partido de General Pueyrredón, (apoyo de palabra como en todos estos casos); decenas de escritores nos dimos cita para honrar la poesía, la narrativa, el canto y la solidaridad por sobre todas las cosas.
Creo que fue el lunes 1ero de mayo, actividad que alcanzó lo mayor de la calidez de todo este encuentro. Luego de mi recital “Barricada Poética”, dedicado al poema y a la lucha internacional de los trabajadores de todo el mundo. Vino la presentación de los artistas plásticos y allí fue el homenaje, el recordatorio, el llanto vertido por la partida de “Mónica Castro; Moni; Mona Vasser escritora” y tantos otros apelativos, para definir a esta amiga del alma. Docente de vida, pintora y poeta de corazón combatiente, que estará por siempre dentro nuestro, el recuerdo dulcedolor de todo los que la conocimos.
Su joven hija, su hijo, todas las chicas de La Plata que vinieron a participar y colaborar con este homenaje y encuentro. Le pusieron una cuota de Juventud Poética y Primaveral, para aunar el dolor, la emoción, el poema, el canto, el rock, la danza ritual de la alegría como rito pagano sagrado, de no olvidar; de estar presentes y celebrar la existencia en todas sus facetas.
Habrán notado que escribí más del homenaje a Mónica Castro, que de todo el desarrollo del encuentro. Encuentro que fue de poesía, de narrativa, de canto, de música, de relatos, de plástica y de transmisión de conocimientos.
Tendría que hablar de las mesas de lecturas, de Mar del Plata, de Buenos Aires, de Mar de Ajó, de Córdoba, Mendoza, La Rioja, Entre Ríos, Santiago del Estero, Formosa, entre otras, y todas ellas de gran potencialidad poética.
Tendría que hablar en detalle de la presentación los libros, La vida es broma, de Rafael Mones Ruíz, de Mendoza. Del libro Hacen falta Molinos, de Vilma Sastre. Del Poemario del ángel dormido, de Sara Fernández, abuela de Sebastián Bordón. “Mujer de piedra y verso” de nuestra Mona Vasser, cuyo… soy… ”Un error biográfico, / una enfermedad genética, / un mal Karma. Será siempre / un holograma de mi, / estando y no”. Para soportar su rara y inefable enfermedad, que se da, de uno en un millón de personas. “Recorrer trasnochados bar y bluesa! Grito de: “Libertad a Baco, dejadlo pasar”. Y como maestra vivenciar en carne propia, la desazón injusta de “tal vez la soja los deje estériles o alguna campaña anticonceptiva prenda y les quite el único sentido a sus vidas: parir del barro al cielo y del infierno al paraíso”.
Presentación del libro “Raíz de agua”, del excelente poeta Dardo Festino, de Mar del Plata y tengo que nombrar a tantos otros a los libros Instinto, Bitácora del Alma , Melodías del alma con el ser; Las primas de Villaguay , Arpegios de papel y agua; ¿Quién es Delia? ; La aventura de narrar; Estigma de vuelo; Hijos de la casualidad; Ocho Disparos; Sentires Victoria, Raíz de Agua; presentación de las que pude presenciar y algunas tantas otras, que no pude, por distintas razones y pido disculpas a todos sus poetas y autores.
Sería injusto no reconocer todo el trabajo y el empeño organizativo de este gran encuentro nacional de escritores de Mar del Plata 2017, en las tareas de Guille, Bety, de la amistad trabajadora de Félix, de los rockeros “Gallos de Riña”, del folklorista Freddy Paez un acordeón santiagueño, que nos hizo bailar, cuecas, carnavalitos, chacareras y cumbias poéticas todas las noches, celebrando la existencia y los duendes presentes de la poesía que nunca morirán.
