El presupuesto bonaerense aumenta los salarios un 20 por ciento para 2019

El proyecto de Presupuesto para el año que viene que el gobierno de María Eugenia Vidal enviará el lunes a la Legislatura, incluirá partidas para atender aumentos salariales para empleados administrativos, docentes y policías del orden del 20 por ciento.

Ese porcentaje es el mismo que trascendió a nivel nacional, con lo que Vidal seguirá, como ocurrió en los últimos años, los lineamientos trazados por la Nación en materia salarial.

El Presupuesto nacional, que acaba de votarse en la Cámara de Diputados, proyecta una inflación para 2019 del 23 por ciento. En ese contexto, la pauta salarial del 20 por ciento que prevé la Provincia podría abrir un nuevo escenario de tensión con los sindicatos.

El gobierno de Vidal no ha logrado cerrar paritarias con los docentes, empleados judiciales y médicos de los hospitales públicos.

Sí, con los sindicatos que nuclean a los empleados administrativos -excepto ATE-, por un 30 por ciento en lo que va del año, con el compromiso de reabrir la negociación en los primeros días de diciembre.

Los sectores sindicales más combativos reclaman un aumento que se acerque a las estimaciones de inflación del 45 por ciento.

En relación a los principales lineamientos del proyecto de Presupuesto para el año que viene, el monto final rondaría los 855 mil millones de pesos. “Será un Presupuesto austero”, adelantaron fuentes de la Gobernación.

Según trascendió, el lápiz rojo pasará por diversas áreas. Las que se salvarán de la tijera serán Desarrollo Social, Seguridad y Obras Públicas.

No parece casual: se trata de las tres grandes apuestas de Vidal de cara a su proyecto de reelección.

La gobernadora tiene decidido reforzar las partidas de asistencia social -seguramente habrá otro incremento antes de fin de año- en el marco de la crisis económica.

La iniciativa oficial verá la luz aún cuando no esté concluida la negociación con el gobierno nacional por los fondos que Vidal está reclamando como compensación por el Fondo del Conurbano.

La provincia deberá absorber unos 40 mil millones de pesos por el traspaso de subsidios nacionales al transporte y a la luz, a lo que hay que sumar la eliminación del Fondo Sojero. Buenos Aires “pagará”, así, la mayor parte del ajuste que le toca a los estados provinciales.

Por eso reclama a la Nación unos 19 mil millones de pesos. Ese monto surge de la actualización del Fondo del Conurbano que se negoció en 2016 en base a una inflación muchísimo más baja que la que finalmente se registró el año pasado y la de este año.

Si bien en la Provincia se muestran confiados en recibir algún aporte de la Casa Rosada, no existen certezas acerca de su volumen. Por eso, no se incluirá ninguna partida en el Presupuesto por ese concepto. “No vamos a incluir nada que no tengamos acordado”, dicen cerca de Vidal.

Si bien los lineamientos finales del proyecto se manejan en el marco de un fuerte hermetismo, trascendió que será un Presupuesto que seguirá apuntando a bajar el gasto en diversas áreas.

Lo que sigue siendo un enigma es cuál será la política impositiva bonaerense para el año que viene. Concretamente, si la Provincia impulsará aumentos del Inmobiliario y otros tributos y, en todo caso, de qué porcentajes serán.